• Donostia-San Sebastián - En el Centro médico-quirúrgico Zurriola, sito en la calle Gran Vía nº3, 20002
  • Bilbo-Bilbao- IMQ Amsa Hospital de día, calle Heros nº 28, 1º.
  • Santurtzi-Santurce (Bizkaia-Vizcaya) IMQ Amsa Hospitalización, Hospital San Juan de Dios, Avenida Murrieta nº 70,

Preguntas frecuentes

Preguntas frecuentes

Preguntas frecuentes sobre Estimulación Magnética Transcraneal


¿Tienes alguna duda no resuelta? ponte en contacto conmigo y pregúntame sin compromiso. Estoy para ayudarte.

La estimulación magnética transcraneal (EMT, en sus siglas en castellano, y TMS, en sus siglas en inglés) es un procedimiento no invasivo, lo que significa que se hace sin utilizar cirugía ni cortar la piel. Su función es estimular una parte del cerebro mediante un campo magnético.

Este campo magnético puede atravesar la cabeza de forma segura y sin dolor, y así, utilizarse para cambiar la actividad en el cerebro y corregir la actividad anormal que se produce debido a una enfermedad.

Con la Estimulación Magnética Transcraneal, se pretende actuar específicamente sobre un punto concreto de la corteza cerebral (diana terapéutica), relacionada con el problema en cuestión que se está tratando. Por eso mismo, dependiendo de cuál sea dicho problema, la diana terapéutica (punto sobre el que aplicar el campo magnético), será uno u otro.

Numerosos estudios han demostrado que la Estimulación Magnética Transcraneal puede tener un efecto positivo duradero en diferentes enfermedades o problemas tanto psiquiátricos como neurológicos.

La forma de Estimulación Magnética Transcraneal utilizada para la terapia se llama estimulación magnética transcraneal repetitiva o EMTr (o rTMS en sus siglas en inglés).

La Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva consiste en la aplicación de pulsos electromagnéticos a una frecuencia determinada (1Hz-100Hz) – generados por un aparato diseñado para tal fin – a través de una bobina que se coloca sobre el cuero cabelludo.

Estos pulsos atraviesan las estructuras anatómicas hasta llegar al tejido nervioso (corteza cerebral) donde aumentan o disminuyen la actividad de dicha área con el fin de modular la actividad de los neurocircuitos relacionados con los síntomas del paciente.

La diana cortical receptora de la estimulación variará, por tanto, en función de dicha sintomatología. En el caso de la depresión, por ejemplo, la diana cortical suele ser la corteza dorsolateral prefrontal izquierda y/o derecha, y, en el caso del trastorno obsesivo compulsivo (TOC), la corteza dorsomedial prefrontal, el área motora suplementaria o la corteza orbitofrontal.

El objetivo del tratamiento es el de inducir cambios a corto y largo plazo en el funcionamiento de dichos neurocircuitos, cosa que se objetiva a través de la evolución de la sintomatología que presenta el paciente.

La totalidad de los pulsos que se aplican a un paciente van a depender de la enfermedad que se esté tratando, y del paciente en concreto al que se le está aplicando. Así, un tratamiento agudo, llamado también “protocolo inicial de tratamiento o protocolo de inducción”, puede consistir en entre 21.600 y 108.000 pulsos divididos en sesiones (normalmente diarias) de entre 600 y 3000 pulsos.

En función del número de pulsos, así como de la frecuencia a la que se administran los mismos, cada sesión diaria de tratamiento tendrá una duración aproximada que variará entre 3 y 35 minutos.

Si bien aún no se entiende completamente el motivo biológico del funcionamiento de la estimulación magnética transcraneal, aparentemente esta estimulación, suministrada en modo de pulsos (fragmentos de magnetismo) y en un ritmo adecuado, afecta la forma en que funciona el cerebro, modificando la actividad de diferentes neurocircuitos, con el resultado del alivio de los síntomas en el paciente.

Existen diferentes modos de realizar la estimulación magnética transcraneal. Los métodos pueden variar a medida que la medicina sigue avanzando en este campo.

El efecto del campo magnético sobre el tejido nervioso de la corteza cerebral depende de cómo se apliquen los pulsos. Así, si se aplica un pulso magnético por segundo (frecuencia de 1 Hz), se produce un efecto inhibitorio de la actividad neuronal, mientras que si se aplican diez o más pulsos por segundo (frecuencia de >o= 10 Hz), se produce un efecto estimulador.

Esto tiene su significancia por cuanto que en determinadas enfermedades lo que queremos es disminuir la actividad en un lugar y/o aumentarla en otro, al objeto de corregir una disfunción.

A modo de ejemplo, un procedimiento habitual en el tratamiento de la depresión con Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva suele ser el de aplicar una baja frecuencia en la corteza prefrontal dorsolateral derecha (buscando un efecto inhibidor en esta zona), y una alta frecuencia en la corteza prefrontal dorsolateral izquierda (buscando un efecto activador en esta otra).

A su vez, más allá del efecto inmediato del campo magnético sobre el tejido nervioso, posteriormente se producen una serie de cambios o efectos retardados en los neurocircuitos implicados en la zona de aplicación, que forman parte esencial del efecto buscado y que se corresponden con la corrección del estado enfermo. Es por esto que es más correcto o ajustado el término “neuromodulación” (en lugar de estimulación o inhibición) para referirse al impacto que sobre el cerebro conseguimos con estas y otras técnicas de tratamiento.

No.

A pesar de que los protocolos de tratamiento aprobados por los organismos americano (FDA) y europeo (AEM), referidos a las frecuencias de estímulos, intensidades, nº de días de tratamiento, etc, la precisión con la que dichos protocolos son aplicados a los pacientes puede variar bastante. Existen diferentes grados de precisión.

Algo tan relevante en este tratamiento como es la diana terapéutica (el punto de estimulación), con frecuencia suele calcularse en las clínicas de tratamiento mediante la colocación de una capucha de piscina sobre el cráneo y la toma de medidas antropométricas sobre éste. Ello, permite identificar de una manera aproximada, el punto del cráneo sobre el que ha de colocarse la bobina para estimular la zona de la corteza cerebral que nos interesa para ese determinado protocolo. Esta técnica es la denominada Estimulación Magnética Transcraneal Standard.

El problema de dicha técnica es que confía 1) en la escrupulosidad del profesional que realiza las mediciones, y 2) en la correspondencia exacta de las medidas del cráneo con el cerebro subyacente, todo ello sobre la base datos estandarizados de la población y sin tener en cuenta el cerebro real del paciente, en el momento mismo de la aplicación del tratamiento.

Este problema se resuelve empleándose lo que se conoce como “neuronavegación”, de manera simultánea al tratamiento, que consiste en emplear la imagen cerebral del paciente para guiar la colocación correcta de la bobina, para la afinación del estímulo magnético sobre la diana correspondiente.

La Estimulación Magnética Transcraneal personalizada o de alta resolución emplea datos del cerebro del propio paciente, obtenidos a través de técnicas de neuroimagen, a fin de determinar el punto exacto que ha de ser estimulado (diana terapéutica).

Así se facilita una mayor respuesta, y, al tiempo, evitamos estimular zonas de la corteza cerebral que no es necesario estimular.

En lo que se conoce como “Estimulación Magnética Transcraneal standard”, la localización del lugar del cráneo en el que ha de colocarse la bobina de tratamiento (y por lo tanto, el lugar de estimulación o diana cortical), se suele calcular mediante un procedimiento de toma de medidas y puntos de referencia sobre un gorro colocado previamente en la cabeza del paciente.

Se trata de una misma técnica que se emplea para todos los individuos/as y que, por lo tanto, no tiene en cuenta las diferencias anatómicas entre los cerebros de los distintos pacientes.

En una “Estimulación Magnética Transcraneal personalizada”, se emplea la neuroimagen del paciente (la imagen precisa del cerebro del paciente), para determinar la localización exacta de la diana terapéutica (punto de estimulación). La misma técnica permite, a lo largo de todo el tratamiento, no desviarse en ningún momento de dicho punto. Por eso se habla, en estos casos, de “Estimulación Magnética Transcraneal guiada por neuronavegación”.

Existen diferentes sistemas y marcas tecnológicas que permiten la neuronavegación.

Algunas de ellas están basadas en campos magnéticos, (ej. MAGVENTURE neuroimaging, Neurostim), y otros emplean la resonancia magnética cerebral del paciente (brainsway, Localite), siendo la más precisa de todas ellas, capaz de discriminar milímetros, el sistema TMS Navigator de la marca alemana “LOCALITE”, que emplea una tecnología óptica por infrarrojos.

Nosotros hemos apostado por:

1) la Estimulación Magnética Transcraneal personalizada, guiando la Estimulación Magnética Transcraneal a través de la neuronavegación sobre la imagen del cerebro del propio paciente, y

2) la precisión de la técnica, para lo que nos sirve no solo la neuronavegación empleada sino también otros equipos que empleamos y que añaden precisión.

Para la neuronavegación, empleamos una resonancia magnética cerebral del paciente, a través de un protocolo específicamente diseñado por nuestro equipo para su uso y adaptación al software y la tecnología que empleamos (localite TMS navigator).

Igualmente, se emplean dispositivos adicionales y tecnología adaptada y pensada específicamente para facilitar la aplicación de la Estimulación Magnética Transcraneal de la manera más precisa posible.

De esa manera maximizamos tanto la personalización como la precisión y eficacia de la técnica, garantizando que el protocolo empleado en el paciente, y aprobado por los organismos sanitarios correspondientes (FDA, AEM), sea escrupulosamente aplicado al paciente desde el principio y hasta el final del tratamiento.

El equipo de estimulación empleado es el correspondiente a la alta gama de la marca danesa MAGVENTURE, líder en el sector.

El equipo de neuronavegación empleado es el de la marca alemana LOCALITE, también líder en su sector y considerado el de mayor precisión del mercado.

EQUIPO DE ESTIMULACIÓN:

Equipo de estimulación magnética marca Magventure, modelo X100 MO de 100 pps con opción MagOption. Único equipo de estimulación con certificación aprobada por la CE para el tratamiento con Estimulación Magnética Transcraneal.

Bobina de estimulación, modelo D-B80 con refrigeración dinámica y con aprobación Europea para el tratamiento de la depresión mayor, adicciones y TOC.

Sillón de tratamiento Magventure con reposa cabezas, de diseño específico para el tratamiento con Estimulación Magnética Transcraneal.

Brazo de estimulación articulado de acero inoxidable integrado en el carro para bobinas de estimulación

Almohada de fijación y bomba de vacío adaptada de la casa magventure,para mayor precisión del tratamiento con Estimulación Magnética Transcraneal, y mayor comodidad para el paciente.

 

Equipamiento añadido de precisión:

Brazo de tratamiento avanzado modelo “FLOW” articulado e integrado en el sillón de tratamiento de magventure, con precisión añadida de cara al posicionamiento de la bobina de tratamiento, evitando la pérdida del contacto de ésta con la cabeza del paciente en el transcurso del tratamiento.

 

EQUIPO DE NEURONAVEGACIÓN:

Navegador Estimulación Magnética Transcraneal edición Premium para investigación avanzada Localite TMS Navigator, con neuronavegación a través de seguimiento avanzado óptico Polaris Vega.

Software Localite MR-based, MR-less y fMR-based para la neuronavegación sobre neuroimagen estructural y funcional.

No.

La Estimulación Magnética Transcraneal tiene unas indicaciones y una técnica de aplicación específicas que han de respetarse, y, hecho esto, la probabilidad de respuesta o de curación del problema en cuestión puede ser muy variable dependiendo del problema de que se trate.

Dicho esto, la ciencia avanza rápido, y constantemente van surgiendo nuevas evidencias que sugieren nuevas indicaciones y/o cambios en los protocolos ya existentes, que permiten mejorar la respuesta y/o tratar nuevos síntomas o enfermedades, antes incluso de que las agencias reguladoras correspondientes establezcan la nueva indicación o utilidad (ver más abajo).

¿Para qué enfermedades en concreto sirve la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva?

La Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva puede ser útil para el tratamiento de varias enfermedades o problemas tanto psiquiátricos como neurológicos, tales como:

  • Depresión, depresión resistente al tratamiento o depresión refractaria, depresión en pacientes con intolerancia o rechazo a los fármacos.
  • Trastorno obsesivo-compulsivo.
  • Adicciones (cocaína, adicción al tabaco, juego patológico o ludopatía).
  • Estrés postraumático.
  • Para algunos síntomas de la esquizofrenia como las alucinaciones auditivas o los síntomas negativos.
  • Dolor neuropático, dolor crónico.
  • Migrañas.
  • Acúfenos o tínnitus.
  • Fibromialgia (con efectos sobre la calidad de vida, el dolor y la fatiga).
  • Daño cerebral. La rehabilitación en el daño cerebral y el tratamiento de secuelas de un accidente cerebro-vascular agudo (ACVA), tales como los problemas motores, afasia, negligencia hemiespacial.
  • Enfermedad de Parkinson (mejora de síntoma motores y depresión).
  • Esclerosis múltiple (mejora de la espasticidad).
  • Epilepsia parcial refractaria.
  • Deterioro cognitivo leve.
  • Enfermedad de Alzheimer (mejora de síntomas cognitivos sobre todo en casos leves o tempranos).

También se encuentra en fase de investigación el posible uso o beneficio de la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva en síntomas de otras patologías como;

  • Trastornos de la conducta alimentaria.
  • Trastornos de ansiedad. Trastorno de ansiedad generalizada, trastorno de pánico, fobias.
  • Trastornos del espectro autista.
  • Trastorno por déficit de atención con hiperactividad.
  • Retraso mental (mejora en el lenguaje).
  • Distonías.
  • Discinesia producida por levo-dopa.
  • Temblor esencial.
  • Paresia flácida.

Lo mejor que puede uno/a hacer, es, siempre, consultar con su profesional de confianza (psiquiatra, psicólogo, neurólogo, médico de cabecera etc). Coméntele sus dudas, refiérale a esta web y/o diríjase usted mismo o dirija a un familiar de confianza hacia nosotros para consultar cualquier duda que puedan tener sobre cualquier aspecto de este, u otros tratamientos de estimulación cerebral.

Tanto la agencia europea del medicamento (AEM) como la equivalente de los estados unidos (FDA, Food and drug administration) han aprobado varios protocolos y dispositivos diferentes para el tratamiento de diferentes trastornos.

En concreto, En Europa, el empleo de esta técnica está avalada por la Unión Europea a través del marcado de Conformidad Europea (CE) para el tratamiento del trastorno depresivo resistente, el trastorno depresivo con ansiedad asociada, el trastorno obsesivo compulsivo (TOC) y las adicciones.

 

En el caso de EEUU, la FDA ha aprobado asimismo la indicación para la depresión resistente (la depresión en personas que no se han beneficiado de medicamentos antidepresivos previos), la migraña y el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).

Si.

En ocasiones especiales la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva puede usarse para indicaciones todavía no aprobadas (llamadas en inglés “off label”) cuando se considera clínicamente apropiado, aunque dicha indicación, en ese momento, aún se considere en investigación.

Sea como fuere, la recomendación habrá de realizarse siempre en función de la evidencia científica disponible en cada momento, así como con el equipo y profesionales adecuados, y todo ello en su conjunto tras una minuciosa valoración del riesgo/beneficio y una adecuada información al paciente y sus familiares.

En última instancia, la decisión siempre se deriva del análisis individualizado del caso, y atendiendo al diagnóstico y la insuficiente, o falta de respuesta a tratamientos previos.

El término «fuera de indicación» o indicación “off label” se refiere a la carencia de aprobación para un uso determinado de un dispositivo o medicamento.

Las compañías farmacéuticas y los fabricantes de dispositivos no pueden promocionar un producto para ninguna otra finalidad que la que se estudió en los ensayos previos a su comercialización.

Sin embargo, una vez que se aprueba un medicamento o dispositivo, los médicos pueden indicarlo para cualquier otro problema clínico, siempre que a su juicio sea seguro y efectivo. Los usos de la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva fuera de indicación incluyen protocolos específicos extraídos de publicaciones científicas aleatorizadas, controladas con placebo y revisadas por pares publicadas en revistas de alto impacto (nivel de evidencia 1a-1b).

En cada caso, ha de notificarse y solicitarse un consentimiento verbal si durante su tratamiento se necesitara el empleo de algún protocolo fuera de indicación.

La decisión de administrar el tratamiento “off-label” correrá a cargo del médico prescriptor, quien realizará una revisión individualizada y pormenorizada de cada caso previo a la prescripción.

Como en cualquier tratamiento de cualquier patología, no es posible saber con absoluta seguridad si un tratamiento va a ser eficaz, o en qué medida. Puede hablarse de mayor o menor probabilidad de respuesta en función de cada caso, lo que depende de algunos factores que deberán analizarse en la evaluación inicial.

En la bibliografía científica hay multitud de datos sobre cada patología y su respuesta a la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva, que van actualizándose. Lo más recomendable es que discuta dichos datos con su médico de confianza y/o, si lo prefiere, con nosotros.

A modo orientativo y para los casos de depresión resistente, el trastorno obsesivo compulsivo y las adicciones, algunas cifras reportadas son:

  • Depresión resistente:

Tasa de respuesta del 58-83%

Tasa de remisión del 28-62%

  • Trastorno Obsesivo Compulsivo:

Tasa de respuesta del 45.2%2

  • Adicciones (cocaína):

Tasa de respuesta del 69%3

Los organismos europeos sitúan la eficacia de cada protocolo de tratamiento con Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva en los diferentes trastornos, conforme va acumulándose información proveniente de la investigación, en tres niveles:

Nivel A (claramente eficaz), nivel B (probablemente eficaz) y nivel C (posiblemente eficaz).

No tener asignado un nivel no significa que el trastorno o problema no pueda beneficiarse del tratamiento, sino que, no se considera que en el momento presente exista un volumen suficiente de dicha evidencia que permita situar dicho trastorno en un nivel.

Ejemplos de niveles alcanzados a día de hoy son:

  • Depresión: nivel A.
  • Trastorno obsesivo-compulsivo: nivel C.
  • Trastorno por estrés postraumático: nivel B.
  • Adicción al tabaco (nicotina): nivel C.
  • Fibromialgia (mejora de la calidad de vida, así como del dolor o la fatiga): Nivel B.
  • Dolor neuropático: Nivel A.
  • Recuperación motora en la mano, tras ACVA: Nivel A.
  • Afasia: Nivel B.
  • Negligencia hemi-espacial: Nivel C.
  • Esclerosis múltiple (mejora de la espasticidad): Nivel B.
  • Epilepsia parcial refractaria: Nivel C.
  • Acúfenos, tínnitus: Nivel C.
  • Enfermedad de Alzheimer (mejora cognitiva en casos leves y/o tempranos): Nivel C.

En función del trastorno neuropsiquiátrico a tratar, existen diferentes alternativas entre las que pueden incluirse los fármacos, la psicoterapia, estimulación eléctrica transcraneal directa o continua, la estimulación eléctrica transcraneal alterna y la terapia electroconvulsiva.

Todas estas alternativas han de ser discutidas en el momento de la evaluación

Consulta inicial

Se programará una consulta inicial con el Dr. Palomo, para analizar si la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva es un tratamiento adecuado para usted. Se revisarán sus síntomas, su historial de tratamiento y las posibles opciones de tratamiento, además de asegurarse de que no existan contraindicaciones de seguridad para el TMS.

Sesiones de tratamiento

Las sesiones de Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva pueden durar desde unos pocos minutos hasta unos cuarenta minutos, según el protocolo que se utilice.

Generalmente se recomienda de lunes a viernes por un período de varias semanas. Estará despierto durante el tratamiento y recostado en una silla cómoda. Durante la sesión de tratamiento, se posicionará una bobina que se asemeja a una figura de ocho sobre su cabeza.

La bobina creará un campo magnético que inducirá una actividad en su cerebro. Después del tratamiento, podrá retomar sus actividades cotidianas normales.

Etapas del tratamiento

La terapia con Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva generalmente consiste en un período de inducción inicial seguido de una fase de disminución gradual o de continuación que involucra sesiones menos frecuentes. Dependiendo de su respuesta, el tratamiento agudo (inducciones) generalmente implica sesiones de tratamiento diarias (de lunes a viernes) durante un período de cuatro a seis semanas. Después de su tratamiento agudo inicial, se pueden recomendar sesiones de reducción gradual. El equipo discutirá esto con usted durante sus evaluaciones de seguimiento y determinará si podría beneficiarse de tratamientos adicionales.

PROCEDIMIENTO GENERAL

La sesión de Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva, se llevará a cabo según el caso en el Centro Médico-Quirúrgico Zurriola (calle Gran Vía nº 3, Donostia-San Sebastián) o en el hospital de día de AMSA-IMQ  (Paseo de los Heros 28, Bilbao).

El equipo de la Unidad de Estimulación Magnética Transcraneal está compuesto por dos psiquiatras, un psicólogo y dos enfermeras. Todos ellos cuentan con la formación y expertía necesarias para la administración del tratamiento. El personal estará presente durante toda la sesión. La EMTr no requiere de anestesia ni sedación, por lo que el paciente permanece despierto y alerta durante todo el procedimiento.

Antes de comenzar la sesión de Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva, se retirará cualquier objeto metálico o magnético (joyas, llaves, tarjetas de crédito, etc).

En la primera sesión, el Dr. Palomo realizará una evaluación inicial y se explicará toda la información referente al tratamiento. El paciente dispondrá del tiempo necesario para poder realizar cualquier pregunta que estime oportuna previo al inicio del tratamiento. Posteriormente se pasará a la sala de estimulación donde el paciente se posicionará cómodamente en un sillón articulado.

Una vez sentado, se le proporcionarán tapones para los oídos y se le realizará el cálculo del umbral motor. Esto es el cálculo de la amplitud necesaria para estimular la corteza motora de cada paciente de forma individualizada, buscando una respuesta en el 50% de las estimulaciones. Para esto se posicionará la bobina en la cabeza y se administraran pulsos simples, separados entre ellos por unos segundos.

Con este tipo de estimulación se objetivará visualmente (o bien mediante electromiografía) la contracción de algunos dedos de la mano o de los pies en función de la diana cortical que se pretenda estimular. El cálculo del umbral motor podrá realizarse siempre que se considere necesario por el equipo. Una vez se determine el umbral motor, partiendo de éste, se realizará un cálculo de la amplitud necesaria para estimular la diana cortical que se pretenda estimular en función de la patología a tratar.

Tras el cálculo del umbral motor, el paciente permanecerá sentado en la misma posición y se procederá a colocar la bobina en la diana cortical para administrar la primera sesión del protocolo de inducción.

En las sesiones sucesivas, cualquier miembro de la unidad (psiquiatras, enfermer@s, psicólog@s, debidamente formados para la administración de la técnica) puede administrar el tratamiento siguiendo las indicaciones y protocolos pautados en la primera sesión por el Dr. Palomo.

El procedimiento será similar al de la primera sesión, sin calcular el umbral motor, se dará tiempo para tener una breve conversación en la que se intercambien impresiones del tratamiento.

Posteriormente el paciente será conducido a la sala de estimulación donde se le proporcionarán sus tapones para los oídos (puede solicitarse el recambio en cualquier momento del tratamiento) y se procederá al tratamiento.

Cualquier sesión podrá ser interrumpida en cualquier momento por el paciente o por el personal del equipo. 

En las sesiones, en función del protocolo se administrarán entre 600 y 3000 pulsos a una determinada frecuencia (1Hz-50Hz) de forma continua o intermitente.

Durante la administración de estos pulsos el paciente puede sentir la contracción de algún músculo facial puesto que se estimula directamente sobre su inserción en el cráneo. Estas contracciones no suelen ser dolorosas y se tratarán de disminuir en la medida de lo posible por el personal del equipo.

Los pulsos, además, en función de la amplitud y la frecuencia pueden resultar molestos e incluso dolorosos en algunos casos aislados. El personal del equipo tratará de disminuir al máximo cualquier molestia que pueda ser derivada del tratamiento. En caso de resultar muy molesta la sesión, el paciente o cualquier miembro del equipo, puede interrumpir el tratamiento de forma temporal o permanente.

En el caso de realizarse varias sesiones en el mismo día, el paciente descansará aproximadamente 20-40 minutos entre una y otra. En este periodo de tiempo no se recomienda ingerir sustancias psicoactivas como la cafeína o la nicotina. Posteriormente será llamado a entrar a la unidad, se confirmará que se encuentra estable, sin efectos secundarios que puedan ser atribuibles a la primera sesión y se repetirá el procedimiento.

NÚMERO DE TRATAMIENTOS

El número exacto de tratamientos que recibirán los pacientes no se puede predecir anticipadamente ya que dependerá del trastorno de que se trate, las necesidades del paciente, la respuesta al mismo y el criterio médico.

Normalmente se recomiendan 36 sesiones de inducción y posteriormente puede ser necesario realizar sesiones de mantenimiento (en frecuencia y número a determinar por el médico y el paciente al finalizar el tratamiento).

El tratamiento se suele administrar a razón de 5 sesiones por semana (lunes a viernes) si bien en función de las necesidades del paciente, pueden diseñarse protocolos con frecuencias de administración diferentes. El número de sesiones se determina según la respuesta y evolución de cada paciente, siendo lo habitual en un protocolo de inducción 36 sesiones (3.5 – 7 semanas).

Habitualmente, los pacientes que responden a la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva comienzan a obtener resultados entre las sesiones 15 y 20. Sin embargo, algunos pacientes pueden experimentar resultados más precozmente, mientras que otros pueden tardar más tiempo, incluso semanas después de completar el tratamiento. En cualquier caso, el paciente o cualquier miembro del equipo podrá detener el procedimiento y tomar la decisión de finalizar el tratamiento en cualquier momento del mismo.

Respecto a los protocolos de mantenimiento no existe a día de hoy una evidencia robusta sobre la mejor forma de administrarlos. Son protocolos menos intensivos que el de inducción que pretenden abarcar un espacio temporal superior. Normalmente se programan 5-8 sesiones cada 1.5 meses, aunque varía en función del estado del paciente. Por tanto, si el paciente se encuentra estable psicopatológicamente podemos posponer la administración de las sesiones y, por el contrario, si se objetiva un empeoramiento podemos adelantar la administración de las mismas.

La estimulación magnética transcraneal repetitiva es un tipo de estimulación cerebral no invasiva, que no requiere cirugía ni implantación de electrodos.

En general, se considera una técnica segura y fácil de tolerar, siendo los efectos secundarios leves, moderados, y transitorios (mejorando poco después de la sesión).

Los más comunes suelen incluir:

  • Molestias y dolor en el cuero cabelludo
  • Dolor de cabeza
  • Hormigueo, espasmos o contracciones de los músculos faciales

Al igual que con cualquier tratamiento médico, la administración de Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva puede conllevar efectos adversos. Sin embargo, la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva generalmente es bien tolerada y solo un pequeño porcentaje de pacientes interrumpe el tratamiento debido a efectos secundarios.

Durante el tratamiento, alrededor de un tercio de los pacientes experimentan pequeñas molestias o sensaciones incómodas, golpecitos o ligeras contracciones faciales en la zona del tratamiento mientras la bobina magnética actúa. Tales situaciones pueden resolverse fácilmente por el personal que aplica la técnica ajustando la configuración de la estimulación o haciendo cambios en el lugar donde se coloca la bobina.

Además, aproximadamente la mitad de los pacientes tratados con Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva experimentan leves dolores de cabeza que tienden a mejorar con el tiempo y suelen responder bien a los analgésicos convencionales.

Dado que el equipo de Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva produce un clic con cada pulso, para la seguridad del paciente se utilizan tapones para los oídos, evitando de esta forma que afecte a la audición. No se ha informado ningún caso de afectación permanente de la audición con una protección correcta.

La Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva no se ha asociado a alteraciones cognitivas (pensamiento y memoria).

El efecto adverso conocido más grave de la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva es la provocación de una crisis convulsiva.  El riesgo de inducir una crisis convulsiva es similar al de psicofármacos ampliamente utilizados (antipsicóticos, antidepresivos tricíclicos, bupropion etc.).

Si bien se han descrito convulsiones con el uso de equipos de Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva, el riesgo es extremadamente bajo, 1 en 30.000 tratamientos (0.003%) o 1 en 1.000 pacientes (0.1%).

Los riesgos de la exposición a Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva en el embarazo son desconocidos por lo que, en mujeres en edad fértil, resulta necesario descartar un posible embarazo antes de iniciar el tratamiento.

Se desconocen posibles efectos secundarios de la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva a largo plazo si bien durante los 20 años que lleva utilizándose no se han descrito y se espera que, en todo caso, los cambios inducidos en el cerebro sean beneficiosos.

 

Antes de recibir el tratamiento, debe de realizarse una evaluación médica (que puede incluir un examen físico y/o determinaciones de laboratorio u otras pruebas complementarias) y de la salud mental y/o neurológica en función de cada caso.

Además, para la realización de la Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva con neuronavegación (guiada por neuroimagen), se realizará una resonancia magnética cerebral con un protocolo específico diseñado por nuestro equipo y adaptado al uso para este fin terapéutico.

Por otro lado, el paciente ha de firmar un consentimiento informado para la realización del procedimiento (que puede ser revocado por el paciente en cualquier momento en que lo desee), e informar al equipo de diferentes aspectos de su salud, importantes de cara a la seguridad, y que son recogidos en un formulario.

Por otro lado, el paciente ha de informar aI equipo de si;

  • Está embarazada o está pensando en quedar embarazada.
  • Tiene piezas de metal o algun dispositivo médico implantado en el cuerpo. En algunos casos, los pacientes con dispositivos o implantes de metal pueden someterse a una estimulación magnética transcraneal repetitiva. No obstante, debido al campo magnético potente que se genera durante la estimulación magnética transcraneal repetitiva, este procedimiento no se recomienda para personas con los siguientes dispositivos:
    • Espirales y clips o bobinas de aneurisma.
    • Stents en cuello o cerebro.
    • Estimuladores implantados.
    • Marcapasos cardíacos o desfibrilador cardioversor implantable (DCI).
    • Stents cardíacos
    • Electrodos para controlar la actividad cerebral.
    • Implantes metálicos en oídos ()ej, implante de cóclea para la audición) u ojos.
    • Fragmentos de metralla o balas.
    • Tatuajes faciales con tinta metálica o magnética.
    • Cualquier otros dispositivo u objetos metálicos implantados en o cerca de su cabeza.
  • Toma medicamentos, incluidos los medicamentos de venta con receta médica y los de venta sin receta, suplementos herbales, vitaminas u otros suplementos, y las dosis.
  • Tiene antecedentes de convulsiones o antecedentes familiares de epilepsia.
  • Tiene otras afecciones de salud mental, como problemas con el alcohol o las drogas ilícitas, trastorno bipolar o psicosis.
  • Tiene daño cerebral debido a una enfermedad o lesión, como un tumor cerebral, un accidente cerebrovascular o una lesión cerebral traumática.
  • Tiene dolores de cabeza frecuentes o intensos.
  • Tiene cualquier otra enfermedad.
  • Ha recibido tratamiento con estimulación magnética transcraneal repetitiva anteriormente y si fue útil para tratar su padecimiento.

Si. Tanto la psicoterapia como la farmacoterapia son tratamientos complementarios que pueden ayudar en la respuesta. Puede ser recomendable el cambio del fármaco que toma el paciente, coincidiendo con el tratamiento con Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva, si dicho fármaco no ha sido eficaz, todo ello para optimizar la eficacia de ambos.

Si, el paciente puede acudir a recibir el tratamiento con Estimulación Magnética Transcraneal Repetitiva, y continuar con sus consultas con su psiquiatra de confianza. En cualquier caso, será algo a establecer en la primera consulta o consulta de evaluación.

DÓNDE ESTAMOS

CONSULTAS

  • CONSULTA PRIVADA DE PSIQUIATRÍA Y PSICOTERAPIA DE ADULTOS E INFANTO-JUVENIL
  • CONSULTA DE NEUROMODULACIÓN CEREBRAL
CONSULTA PRIVADA DE PSIQUIATRÍA Y PSICOTERAPIA DE ADULTOS E INFANTO-JUVENIL

San Sebastián

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